El sábado es la hora de hornear. Y no necesariamente dulce. Para aquellos para quienes el queso y la salchicha son el mejor pastel, también hay cosas sabrosas (y hay muchas).
Por ejemplo, estos rollos. Cuanto más queso hay en el relleno, más sabroso es. Aquí, lo principal es no poner demasiado queso, porque puede salir y estropear la apariencia.
No sé cuánto tiempo estarán almacenados y cuánto tiempo la masa no se pondrá rancia, por alguna razón no se quedan con nosotros (todos tienen buen apetito).
Nosotros tomamos:
Para la prueba
- 300 gramos de harina
- 150 ml de agua tibia
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharadita de sal
- Media cucharadita de azucar
- Levadura: de acuerdo con las instrucciones de los que usa. Por cierto, puedes probar la levadura seca Saf-moment para pizza (se calcula 1 sobre por 500 g de harina), son con aroma de cebolla y, en general, quedan bien en masa sin huevo.
Para rellenar:
- 150 gramos de salchicha o jamón en rodajas finas
- 200 gramos de queso duro; también tendrá que cortarse en rodajas muy finas, directamente en rodajas
Para una corteza fragante:
- Un par de cucharadas de aceite de oliva
- Albahaca, mejorana, orégano - pellizca cada uno
- Una pizca de sal
- Un poco de queso rallado (opcional, puedes hacerlo).
Como cocinamos:
Amasar la masa de la forma habitual en agua tibia con un poco de harina, una pizca de azúcar, levadura. Cuando aparezca una cabeza espumosa, agregar la sal, la mantequilla y el resto de la harina y amasar.
Dejamos subir 2 veces (si de repente decidiste probar la levadura de pizza, sobre la que escribí anteriormente, solo una subida será suficiente).
Cortamos el jamón o la salchicha (queda genial con el salami) en rodajas muy finas, cortando el queso con las mismas lonchas.
Amasar la masa, dividir en trozos y enrollarlos en finas tortas.
En cada tortilla ponemos lonchas de jamón o chorizo, y encima - queso. Lo enrollamos en un rollo y exprimimos bien los bordes, y eso es todo, para que el queso no se filtre.
Lo esparcimos en una bandeja de horno, lo dejamos distanciar. Mezclamos el aceite con sal y hierbas, engrasamos las tapas y las enviamos al horno a 180-200 grados durante 15 (quizás un poco más, dependiendo de tu horno) minutos.
¡Buen provecho!