Hace muchos años que hago paté siguiendo la misma receta y siempre me sale muy sabroso. Recientemente, una vez más hice un paté y no pude entender qué estaba mal. Parece que hizo todo como de costumbre, pero el sabor no es para nada el mismo. Duro, abultado. Y solo entonces me di cuenta de lo que estaba mal. Guisé el hígado agregando agua a la sartén. Para no atormentarte con anticipación. mi secreto es la crema en el que se debe guisar el hígado de pollo. En cuanto repetí la preparación, pero esta vez con crema, el sabor se volvió tan delicado y cremoso como antes.
Ahora la receta en sí:
- Hígado de pollo - 500 gr.
- Zanahorias - 1 pieza
- Cebolla - 1 pieza
- Crema -10-20% - vidrio
- Mantequilla - 150 gr.
- especia
Empecemos a cocinar. Primero, tres zanahorias ralladas y picar la cebolla. Cocine a fuego medio durante 10 minutos.
Mientras se cuecen las verduras, es necesario enjuagar bien el hígado de pollo, cortarlo en trozos medianos y freír en una sartén durante 5 minutos.
Luego agregue la crema, baje el fuego y cocine a fuego lento el hígado durante unos 15 minutos con agitación constante.
Salar las verduras preparadas y el hígado, enfriar.
Poner en una licuadora y batir.
Agrega la mantequilla (la saqué una hora antes de cocinar para que se ablande) y vuelve a batir todo bien.
¡Eso es todo! ¿Por qué comer sándwiches de salchicha cuando puedes hacer un paté estupendo? Delicioso y sin aditivos.
¡Buen provecho a todos! ¡Seguro que te gustará!